
Llevaba muchos años esperando este momento. Tantos, que pensaba que nunca se iba producir. El viernes pasado se cumplió mi deseo y pude ver a los
My Bloody Valentine sobre el escenario. Como me habían hablado tan mal de su directo anticipaba una decepción sonora (nunca mejor dicho). Pero al final no fue
así. La maraña ruidosa que les caracteriza estuvo a la altura y sólo puedo criticar el bajo volumen de los micrófonos de
Belinda y
Kevin. Os cuelgo su obra maestra para que los que todavía no los
conocéis podáis tacharlo de vuestra lista de cosas pendientes en la vida. Aviso que las primeras veces que lo
escuchéis probablemente os parezca un disco ruidoso y no os guste demasiado. Aconsejo su escucha repetida hasta notar una ligero erizamiento en los pelillos de los brazos. Sólo espero que no
tengáis que esperar tantos años como yo para poder verles en directo.
My Bloody Valentine - Loveless
No hay comentarios:
Publicar un comentario